La Guerra Civil Española y el inicio de la Segunda Guerra Mundial
Introducción
La Guerra Civil Española fue un conflicto bélico que tuvo lugar en España desde el 17 de julio de 1936 hasta el 1 de abril de 1939. Este enfrentamiento supuso un hito importante en la historia de España, pues fue el preludio de la Segunda Guerra Mundial y el fin de la II República.
Antecedentes
El contexto histórico previo a la Guerra Civil Española fue el de una España dividida entre los partidarios del Estado de derecho y los que apostaban por el uso de la violencia para alcanzar sus objetivos. La Crisis del 29 y el fracaso de la Dictadura de Primo de Rivera, sumado a la corrupción y la inestabilidad política, llevaron al estallido de una guerra civil.
El resultado de las elecciones de 1936, en las que el Frente Popular ganó, fue el detonante que desató la Guerra Civil Española. Las fuerzas políticas y sociales más radicales de ambos bandos se encontraron en la lucha armada. El gobierno del Frente Popular y las posiciones extremistas de cada bando llevaron al enfrentamiento armado que duraría tres años.
Los bandos enfrentados
La Guerra Civil Española enfrentó a dos fuerzas opuestas: el bando republicano y el bando franquista. El bando republicano estaba formado por partidos de izquierda y grupos comunistas, mientras que el bando franquista contaba con el apoyo de partidos monárquicos, sectores de la Iglesia católica, y fuerzas conservadoras.
En el contexto internacional, el bando republicano recibió el apoyo de la Unión Soviética, mientras que el bando franquista recibió ayuda militar del régimen fascista de Mussolini, el gobierno nazi de Alemania y la dictadura portuguesa de Salazar.
Desarrollo de la Guerra Civil Española
La primera etapa de la Guerra Civil Española tuvo lugar desde julio de 1936 hasta la primavera de 1937. En este periodo, los republicanos controlaban la mayor parte del territorio español. El bando republicano contó con un apoyo popular importante, aunque el apoyo militar y económico internacional era limitado.
Durante la primavera de 1937, las fuerzas republicanas se reorganizaron y tuvieron lugar importantes operaciones militares. En mayo de ese año, las fuerzas republicanas intentaron ocupar el territorio dominado por el bando franquista, en un intento de asfixiar al enemigo. Sin embargo, los avances fueron limitados y la batalla de Brunete, en julio del mismo año, se saldó con un fracaso republicano.
A finales de 1937, el general Francisco Franco consiguió consolidar el territorio conquistado en el norte de España y prepararse para la invasión del centro y del sur. Los bombardeos aéreos realizados sobre Guernica y la posterior caída de Barcelona en manos franquistas marcaron un antes y un después en la Guerra Civil Española.
La última fase de la Guerra Civil Española, que tuvo lugar entre 1938 y 1939, se caracterizó por la presencia activa de fuerzas internacionales. Las potencias internacionales se interesaron por el conflicto y mantuvieron una fuerte actividad en el campo de batalla. Los republicanos recibieron el apoyo de la Unión Soviética y las Brigadas Internacionales, mientras que los franquistas contaron con la ayuda fascista de Italia y Alemania.
Finalmente, el 1 de abril de 1939, el bando franquista se impuso en la Guerra Civil Española y se inició un largo periodo de 40 años de dictadura.
Consecuencias de la Guerra Civil Española
La Guerra Civil Española tuvo graves consecuencias tanto para los vencidos como para los vencedores. Las consecuencias políticas, económicas y sociales se sintieron en todo el país.
El final de la Guerra Civil Española supuso la instauración de una dictadura que duraría 40 años, durante los cuales se produciría una progresiva transformación económica, política y social de España. El proceso de industrialización y modernización de España a partir del gobierno de Franco supuso un cambio profundo en la economía, la sociedad y la cultura de España.
El final de la Guerra Civil Española también tuvo consecuencias en el plano internacional. La estrategia de los países fascistas de apoyar al bando franquista fue vista como una amenaza por los países democráticos, lo que precipitó la entrada de estos en la Segunda Guerra Mundial.
Conclusiones
La Guerra Civil Española supuso una importante etapa en la historia española y europea. El conflicto bélico supuso una transformación profunda en el modelo económico y político de España, y dejó una importante herencia cultural y social. Los efectos del conflicto se sintieron en todo el mundo, puesto que la Guerra Civil Española fue el preludio de la Segunda Guerra Mundial y marcó el inicio de un periodo de inestabilidad en Europa.